Cerrado hoy

Fotografía de Kalabongó en San Basilio de Palenque

Kalabongó regresa a casa: la exposición se toma el Palenque de Benkos

Este miércoles 14 de mayo se inauguró en San Basilio de Palenque la exposición Kalabongó, una muestra que regresa al lugar donde nació después de haber estado en exhibición en el MAMM entre el 26 de abril y el 1 de septiembre de 2024.

La exposición, concebida por artistas, músicos, sabedores y sabedoras del territorio, se despliega ahora por todo Palenque en un gesto que es al mismo tiempo celebración, memoria y reafirmación cultural. Kalabongó se toma casas, calles, esquinas y espacios comunitarios, transformando el territorio en museo vivo y resonante.

Esta versión ampliada y profundamente enraizada de Kalabongó es mucho más que una muestra artística: es una experiencia colectiva que celebra la vitalidad del pensamiento y la oralidad palenquera, y que reconoce en sus expresiones musicales, rituales, gráficas y audiovisuales una forma única de resistencia, creación y continuidad.

Kalabongó pregunta por el sentido de las imágenes para una sociedad, y del arte como herramienta para la acción política, la reivindicación histórica, y la recuperación y reconstrucción de saberes locales y ancestrales. Estas fotografías están entre lo documental y lo místico; todas ellas son resultado de procesos colaborativos, comunitarios y de largo aliento, en las que la figura del artista como creador solitario y la obra de arte como expresión individual se diluyen en la construcción de imaginarios colectivos.

La exposición en Palenque es también la culminación de un proceso afectivo y colaborativo que se recoge en el documento disponible para descarga, en el que se narran los detalles de esta travesía de ida y vuelta entre el MAMM y el Palenque de Benkos. Puedes leerlo aquí:

Acerca de la exposición

En algunas zonas recuerdan que los cimarrones (término colonial para referirse a esclavizados fugitivos) volaban sobre las tierras, combatían tropas y defendían los primeros palenques. El título de esta exposición deriva de un universo alegórico en el que las luciérnagas (kalabongó en lengua palenquera) son los africanos huidos que luchan con murciélagos (colonos) en una batalla en la que la oscuridad es cómplice de la libertad. Kalabongó pregunta por el sentido de las imágenes para una sociedad, y de las prácticas artísticas como herramientas para la acción política, la reivindicación histórica, y la recuperación y reconstrucción de saberes locales vinculados con cosmogonías ancestrales.